Entrenamientos con aviones
KFIR de la Fuerza Aérea Colombiana (FAC). FOTO: Jaiver Nieto Álvarez / ETCE
Cuatro empresas son las
opcionadas para la renovación de las aeronaves.
"La Fuerza Aérea contará
con una fuerza de superioridad aérea que reemplazará nuestros viejos aparatos
Kfir. Creo que las esposas de los actuales pilotos me lo van a agradecer mucho,
porque en realidad ya era un peligro subirse sobre esos aparatos", fueron
las palabras del presidente Gustavo Petro el sábado, al confirmar que se
renovará dicha flotilla, cuya vida útil expira en diciembre de 2023.
La modernización de este tipo de aeronaves - de combate - de acuerdo
con el presidente Petro cumple con "los fines constitucionales que
implican unos instrumentos para que seamos capaces de hacer respetar la
soberanía nacional", de hecho, reconoció que será una "inversión
billonaria y estratégica" que no afectará a las finanzas públicas.
Este diario publicó a finales
de noviembre que se había reactivado el plan de estudio para adquirir la nueva
flotilla, y que para la misma no se planteaba la búsqueda de una adición
presupuestal. De hecho, el proceso se había congelado con el cambio de
gobierno.
En la era de Iván Duque, en
febrero de este año, se había dada visto bueno a una eventual negociación con
la empresa Lockheed Martin de Estados Unidos, fabricante de los F-16 (viper
block 70), al considerar que cumplía con los requisitos, pero con la misma
dificultad: la falta de presupuesto.
En octubre, ya en el gobierno
Petro y tras varias reuniones de seguridad, se planteó nuevamente la necesidad
de la adquisición de una flotilla de poderío disuasivo que tiene como objetivo
defender la soberanía (violación del espacio aéreo o en medio de un conflicto
bélico), además de garantizar la seguridad de la población civil, de la
superficie terrestre y del mar territorial, entre otros ítems.
En esa línea, se partió de cero en el proceso, y de acuerdo a fuentes consultadas por este diario un grupo de oficiales activos de la Fuerza Aérea han venido "desarrollando un estudio técnico detallado de cada una de las propuestas" presentadas por las cuatro empresas fabricantes de este tipo de aeronaves que han estado en el proceso.
"El estudio es técnico,
evalúan cada aeronave, su potencial, factores aeronáuticos y de vida útil, pero
no sobre costos o la inversión", reiteró la fuente, al añadir que este
tipo de negociaciones, por tratarse de elementos bélicos, se hacen entre
gobiernos.
Además, ratificó que las
empresas que siguen compitiendo por vender a Colombia sus aeronaves de combate
son: Lockheed Martin, con sus F-16 (viper block 70); Saab, con su Gripen E/F;
Dassault Aviation, con Rafale C/F3; y Eurofighter, con su Typhoon (C.16). Estas
aeronaves, de tipo caza se la juegan por ser polivalentes (con velocidad normal
o de combate), además de los equipos de tecnología e inteligencia que tengan,
sumado a su vida útil.
Señaló también la fuente que
una flotilla parte de al menos 12 aeronaves, pero que eso se decide de acuerdo
al costo, que es "millonario", al número de aeronaves que se decida
adquirir, las fechas de entrega y la capacitación que recibirán los futuros
pilotos de los aviones.
De los 25 aviones Kfir que
Colombia ha adquirido en 37 años, hoy, cerca de la mitad están en operación a
12 meses de terminar su vida útil.
Tomado de: https://www.eltiempo.com/justicia/investigacion/aviones-kfir-oficiales-activos-analizan-plan-para-renovacion-de-la-flota-726967
Nota: ¿Y los Chengdu J 20? El
J-20 fue uno de los programas de avión de combate de furtivo con el código
J-XX, que fue lanzado como un proyecto de investigación de nuevas tecnologías a
finales de 1990. Desde finales de 2010 se han construido dos prototipos de
pruebas de vuelo antes de su entrada en producción en serie.
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