JUAN LOZANO
Pilas, porque hay aviones de
carne y hueso que vuelan más rápido.
¿De manera que el títere de
Duque era un facho, guerrerista, indolente y corrupto, empeñado en aumentar el
déficit fiscal comprando unos aviones de guerra para satisfacer los apetitos
belicistas de su patrón Uribe cuando dijo que se necesitaba cambiar los Kfir,
pero en cambio Petro es un prócer iluminado, líder en la guarda de la seguridad
nacional y la soberanía fronteriza cuando dice lo mismo?
¿De manera que los aviones que
quería comprar Duque olían a pestilente corrupción, a serruchos, negociados,
comisiones para abogados, militares, relacionistas públicos, congresistas de la
maldita derecha, pero los que quiere comprar Petro huelen a bálsamos
angelicales, a fragancia floral de integridad y transparencia, y nadie, nadie –óigase
bien– nadie se va a ganar un solo céntimo de euro ni en honorarios ni en
comisiones porque estos aviones son un regalo del cielo y de los magnánimos
franceses que curan su despecho futbolístico vendiendo a precio de ganga
aeronaves de guerra a nuestra maltratada patria?
¿De manera que había que sacar
a cachuchazos a todos los que defendían la compra de aviones porque eran unos
canallas crueles, indolentes, miserables, despiadados que les quitaban la
comida de la boca a los niños pobres, pero quienes ahora sostienen lo mismo
están defendiendo a los niños con hambre porque así evitan que una potencia
extranjera les invada su amada patria a través de sus desprotegidos cielos?
¿De manera que –según ‘El
Espectador’– “los franceses aspiran a vender después, lo que en el argot militar
llaman una ‘suite’ completa de armas para acoplar a esas aeronaves de última
generación, que incluye hasta misiles nucleares”?
¿De manera que no dice la
verdad, citado por EL TIEMPO, el vocero de la empresa Saab, fabricante del
Gripen E/F cuando afirma que Colombia decidió adquirir “el avión de combate más
costoso del mercado poniendo en riesgo que los colombianos paguen 1.100
millones de euros en exceso (5,6 billones de pesos)”?
¿De manera que súbitamente
mejoraron las finanzas públicas y el marco fiscal y ahora sí podemos comprar
aviones?
Este episodio deja en claro
por qué con la defensa nacional y la soberanía de la patria no se puede andar
jugando, ni soltando arengas populistas. Si todo lo que hoy dicen es verdad, en
el pasado inmediatamente reciente pusieron en peligro a Colombia por simple
politiquería, para conseguir más votos.
Yo no creo en el ojo por ojo.
La discusión debe ser racional, serena y profunda pensando en la patria para
adoptar la mejor decisión desde la perspectiva de la defensa nacional y la
hacienda pública sin perder de vista las urgencias sociales.
Lo que sí se debe exigir es
transparencia plena. Yo no creo que el ministro de Defensa quiera ganarse una
comisión. Lo digo con claridad. Pero sin generalizaciones atrevidas e injustas,
sí creo que aterrizó en una pista compleja, rodeado de muchos aviones de los de
carne y hueso empeñados en volverse millonarios. Aviones con uniforme, quizás
alguno, y aviones sin uniforme, quizás varios.
Procede una intervención a
fondo de los órganos de control. ¿Cuánto vale la hora de vuelo de cada avión?
¿Cuánto vale a valor presente cada oferta? ¿Quiénes son los comisionistas,
apoderados, representantes? ¿Estaban equivocados los del gobierno Duque o están
equivocados los del gobierno Petro? ¿Había untados o hay untados? ¿Cuál es la
real situación de los Kfir y qué vida útil les queda? ¿Cuánto cuesta la ‘suite’
completa de armas para acondicionar cada avión? ¿Cuál es la estructura de pagos
menos onerosa para la nación? ¿Cuáles son los costos de financiamiento?
¿Quiénes son los miembros del comité evaluador y quiénes fueron en el gobierno
Duque? ¿Se ha calculado el riesgo de maltratar a Washington vs. favorecer a
París? ¿Hay alguna razón que ignoremos más allá de la militar para proceder con
la compra de los aviones franceses?
Aguardamos respuestas.
Nota: ¿Qué papel han jugado
los drones en la guerra de Rusia contra Ucrania?
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